Fire!

Acaba de empezar un nuevo año. Un nuevo año del que espero muchisimo, un año en el que estoy dispuesto a luchar con todo lo que tengo para poder cumplir con lo que me he propuesto. Un año lleno de oportunidades, experiencias y alegrias. Pero hoy, creo que es necesario hacer un poco de retrospectiva y ver qué me ha aportado este último año.

Para empezar, tengo clarisimo que una de las cosas que me llevan a considerar 2010 como el mejor año de mi vida, ha sido el viaje a Punta Cana. En lo personal, no me encontraba en el mejor momento. Sentia que habia algo que se habia perdido, algo que mi pareja no podia darme porque era algo que no podia pedirle. Tenia la sensacion que las pequeñas cosas habian perdido su brillo, y que las cosas importantes aun estaban muy lejos.

Aun a dia de hoy solo puedo sospechar en qué modo ese viaje cambió mi vida. Solo se que ahí encontré algo, encontré parte de mi mismo. Supongo que necesitaba unos dias fuera, en contacto con la naturaleza de un modo desconocido por mi hasta entonces. Sobra decir que el viaje valió muchisimo mas que la pena. La gente que encontré ahi valen un imperio y, por mi parte, he hecho lo posible para intentar salvar algo de lo que encontramos ahí.

Al volver de Punta Cana, empezé a ver las cosas de un modo distinto, me levantaba todas las mañanas con una sonrisa y con una voluntad para hacer realidad mis sueños. Y creo que lo hize. Me centré en mis estudios y en mi relación y las cosas fueron francamente bien durante un tiempo. Y cuando me refiero a francamente bien, hago referencia al hecho de que, por muy jodidas que se presentasen las cosas, siempre habia en mi ganas de luchar, ganas de ir más allá y ganas de demostrarme que podia (y puedo) ser la persona que he elegido ser.

Desgraciadamente, la relación con mi pareja se deterioró. Y se deterioró hasta el punto de que, al cabo de 6 meses de volver, la cosa ya no podia dar más de si. Cuando pasamos más tiempo asustados y con miedo de hacer algo mal, cuando dejamos que el miedo se apodere de nosotros y no nos permita ver el porque hacemos las cosas, cuando dejamos que sean los demás, y no nosotros, los que nos digan como deben ser las cosas... en ese momento ya no merece la pena luchar.

Sinceramente, estoy agradecido que las cosas fuesen de esa forma. En cierto modo, estoy contento de que las cosas terminasen pues, a raíz de eso, fui capaz de hacer frente a una serie de miedos a los que no habia podido enfrentarme aún. Está claro que hay momentos en los que la hecho de menos, está claro que quedaron mil cosas por hacer y que, posiblemente, las que hicimos pudiesen haber sido mucho mejor de lo que fueron. Pero si algo aprendi durante este último año, es que juzgarse a uno mismo, castigarse y lamentarse no te lleva a ninguna parte.

Otra de las cosas que he aprendido este último año, es que puedo considerarme un afortunado. Muchas han sido las personas que he conocido este último año, con las que he compartido muchisimos momentos... y la opinión general de esas personas es que, realmente, ha habido un cambio en mi. Debo reconocer que recibir esos halagos me llenaron muchisimo y me hicieron ver que las cosas que se estan haciendo, se estan haciendo bien.

Existen muchisimas mas cosas de las que me siento especialmente orgulloso. Este verano llego en el mejor momento posible y siento que hice todo lo humanamente posible para llenarlo de buenos momentos. Y creo que lo conseguí. Estar casi 3 semanas de ruta, sin dirección fija, con amigos, playas, noches y musica ha sido una experiencia que me ha llevado a apreciar todo desde un punto de vista más relajado, mas flexible y mas humano.

Y lo que es mas importante, me enseñó a lanzarme a la carretera, básicamente con lo puesto, en busca de algo. El que era ese algo es una cosa que a dia de hoy aun desconozco, pero en el fondo de mi, sé que hice lo correcto. Fui capaz de dejarlo todo para ir a perseguir un sueño, para ir a romper una barrera que, seguramente, solo se hallaba en mi interior.

La vuelta a las clases fue bastante mas dura de lo que esperaba, pero he sido capaz de cumplir con mis obligaciones y mejorar mis resultados académicos, por lo que me siento feliz y un poco más preparado para lo que vendrá.

Y qué es lo que vendrá? Así de bote pronto, creo que para 2011 hay una serie de cosas que sobresalen de la lista. Estas cosas son tan simples y a la vez tan importantes como: Terminar con las 2 asignaturas que me faltan, realizar las practicas tuteladas, empezar el master, sacarme el permiso de conducción, encontrar un trabajo, viajar (Holanda, Belgica y Costa Rica), ganar en experiencias, voluntad y, a poder ser, sabiduria...

En definitiva, del 2011 solo quiero esperar más y mejor. Estos son los mejores dias de nuestras vidas y depende solo de nosotros hacer que sean recordados como dias y años en los que hicimos algo por lo que merece la pena luchar. Pero como todas las cosas en este mundo, hay un precio a pagar y depende solamente de nosotros decidir si el precio merece la pena o no. Yo lo tengo clarisimo.

Feliz año a todos.

Clear Eyes. Full Hearts. Can't Loose!!